La #CRD123, nuestra european bobber, se ha convertido por derecho propio en la protagonista de este reportaje.

Y es que esta BMW R100 S de 1978 no puede lucir mejor a pleno sol mientras escuchamos el leve sonido que produce al deslizarse por las curvas, gracias a sus llamativos escapes de ala de murciélago.

Las sensaciones que nos ofrece esta moto son únicas, especialmente, para los amantes de la cultura de club tan característica de las bobber.

Además, es una moto muy cómoda gracias a la nueva horquilla, que acorta los ejes, y a la tija hecha por Cafe Racer Dreams en aluminio 7075, que sitúa el manillar Renthal más cerca del piloto.

Las instantáneas muestran una moto elegante y sobria en la que priman los grises y marrones, colores poco llamativos que, sin embargo, no evitan que podamos dejar de mirarla.