La CRD115 ya ha cambiado nuestro taller por el garaje de su nuevo propietario. Un empresario de Barcelona que, sin duda, disfrutará de todas las ventajas de esta BMW R100RT de 1980, convertida en una auténtica belleza para todos los sentidos.

Antes de partir, la moto pasó por el mismo procedimiento que seguimos para todas las máquinas que salen de nuestro taller. Lo primero, una prueba de rodaje de 200Km para que nuestros mecánicos se aseguren de que la moto funciona a la perfección.

En muchos casos, las CRDs proceden de motos con varias décadas de historia, así que las desmontamos hasta el chasis para poder volver a montarlas, con infinidad de piezas nuevas. Por ese motivo, es imprescindible comprobar que todo queda bien acoplado.

Una vez realizada esta prueba, un ingeniero se encarga de que todas las modificaciones sean homologadas por Industria y pase la ITV para poder salir a las carreteras.

Y ya solo queda el último paso, hacer un shooting a la altura de tanta belleza con ayuda de nuestro maestro, el fotógrafo Panci Calvo. En estas imágenes, podéis ver con todo lujo de detalles la limpieza de líneas de esta moto y sus magníficos acabados.

¡Buen trabajo!